Te yergues poderoso a pesar de los años; de todo lo que has visto y has vivido; de todo lo que en ti se ha cobijado ignorante de tu ser; de que estás vivo. Cuántas madres, con sus niños refugiados en verano a la sombra de tu risa; cuántos pájaros en ti han anidado, trocando tu hogar por su alegría. Cuántos viejos a tu tronco se arrimaron, solidarios de la misma sabiduría. Cuántos amantes a tu abrigo se han amado. Cuántos ebrios de amor han grabado en ti su dicha. Hasta una guerra, indemne has soportado, mientras a tu alrededor todo lo demás moría. Pero nadie te comprende; nadie es consciente de lo que eres, de lo que significas, del milagro permanente de la muerte y de la vida. Eres raíz, eres savia, eres tronco, eres ramas, eres hojas, eres oxígeno, eres sombra, eres paraguas, eres ancla, eres hogar, eres faro, eres guía, eres fuerza, eres fe, eres Dios, eres Vida.
Alatriste
